CONSENSOS Y ACUERDOS

Habitualmente se habla de consensos y pactos. Para todo. Estando de acuerdo en que son necesarios para los temas fundamentales de carácter transversal, no podemos santificar el consenso y el pacto como objetivo.
Incluso la llamada "estabilidad". La estabilidad es buena como marco de actuación, pero no como objetivo. Si se plantea la estabilidad como objetivo, se corre el riesgo de inoperancia, y el claro ejemplo lo encontramos en el gobierno de Aragón actual.
Pasa igual con los consensos y pactos. Si el objetivo es pactar todo y consensuar todo, ... al final sólo hace falta que se presente un partido (seguramente el bisagra será el que mejor querrá desempeñar el papel) porque las políticas serán iguales, y tan sólo elegiremos la mejor o peor gestión.
Y claro que tiene que haber diferencias. No es lo mismo concertar colegios de una manera que de otra,... Ni privatizar la sanidad o no,... ni crear más o menos sociedades sin saber para qué,... Ni apoyar una universidad privada de una manera u otra.
Los ciudadanos deben saber que no es lo mismo votar a unos que a otros, ya desde el propio concepto de la política.
Después de eso, por supuesto se considera la gestión.